Un vino amplio e intenso, Rocas de Seña 2020 emana un equilibrio y una finura seductores. Los aromas frescos se revelan a lo largo de la degustación y se entretejen en un final picante y persistente.

Ubicado en el Valle de Aconcagua, al norte de Santiago, Chile, Seña es uno de los grand crus icónicos de América del Sur. Este vino excepcional es el resultado de la colaboración, desde 1995, entre Eduardo Chadwick, uno de los embajadores más emblemáticos de los vinos chilenos, y el estadounidense Robert Mondavi, reconocido como uno de los mayores pioneros de los vinos del Nuevo Mundo.

Ahora producido exclusivamente por la familia Chadwick, Seña ofrece una expresión refinada, elegante y equilibrada de los mejores terruños chilenos.

Rocas de Seña está compuesto por una mezcla de vides jóvenes del viñedo Seña con variedades mediterráneas (Syrah y Garnacha) de otra propiedad de la familia Chadwick desde 1999. Este vino toma su nombre de los suelos pedregosos, característicos del Valle de Aconcagua.

2020 es una cosecha donde las condiciones climáticas cálidas se contrastaron con los vientos fríos del Océano Pacífico. Estas condiciones favorecen un crecimiento paulatino y homogéneo de la vid, exhalando el carácter afrutado de las uvas, así como una estructura opulenta, conservando una hermosa frescura.

Envejecido durante 22 meses en barrica (65% nueva), Rocas de Seña 2020 está compuesto por un coupage de Malbec (38%), Syrah (25%), Cabernet Sauvignon (15%), Granache (14%), Petit Verdot (8%).

Roberto Parker 93/100
James Suckling 96/100