Originalmente destilado en el sitio embrujado de un antiguo depósito de sal en Cambridgeshire, había historias de susurros espeluznantes, apariciones parciales y botellas que caían de los estantes. Cerca estaba la antigua Icknield Way, donde se llevaron a cabo batallas históricas entre la revuelta de Boudican y el Imperio Romano. Los lugareños dirían que el fantasma era de un legionario romano perdido, otros sugirieron que era la propia reina Boudicca.

Acabamos de llamar al espíritu... ¡Ghost! Y eso inspiró nuestro vodka rebelde. Un alma sediciosa con una influencia formidable.

Ghost Vodka se destila cinco veces y utiliza grano de trigo cultivado en verano como base. Con una mazorca más larga que el grano de invierno habitual, tiene un perfil de sabor más refinado y complejo que se retiene mejor después de la destilación. Ofrece un sabor inicial (aunque sutil) a melón dulce y un final suave y mantecoso.